jueves, 6 de junio de 2019

USA ESA PARED













El presidente Trump ha sido el ùnico mandatario estadounidense que ha reconocido que el titipuchal de armas que llegan a Mèxico son enviadas por Estados Unidos en la frontera norte del territorio receptor. Incluso uno de sus argumentos de construìr el muro fronterizo es para evitar este tràfico ilegal y convencer que Mèxico  cubra los gastos de la construcciòn. El otro argumento para levantar la pared gigante,  es evitar el tràfico humano ilegal. Y el gobierno peñista adoptò la bandera de que tal situaciòn era un ataque en contra de los migrantes y comprò el problema  como un asunto exclusivo de Mèxico y no de todos los paìses que tambièn  tienen ciudadanos que abandonan sus tierras para cruzar de manera ilegal la lìnea fronteriza de los Estados Unidos. Ahora que la situaciòn vuelve a hacer crisis en el gobierno lòpezobradorista, el ataque va dirigido a Mèxico como ùltimo paìs fronterizo y no al resto de los paìses que no evitan y en determinados casos, hasta alientan el problema migratorio. Es Trump quien a nivel internacional se le  califica como un psicòpata verdugo, pero a  quien muchos, le quieren otorgar las llaves de la supuesta libertad de Venezuela. Al no querer intervenir el gobierno mexicano en la polìtica interior de sus paìses hermanos, como el caso de Venezuela, han dado mayor legitimidad al gobierno mexicano dentro y fuera de su territorio, y aunque Estados Unidos amenaza con aumentar cada mes los aranceles en caso de que Mèxico no controle  el problema migratorio, y presionarlo con un problema econòmico cuando  el asunto a tratar es social y no del todo financiero; lo cierto es, que el gobierno lópezobradorista  que tiene la mirada del mundo, tiene ganada la discusiòn ante los ojos de la fila internacional, y su postura de diàlogo y no victimizaciòn, quizà no sirvan de mucho para el aumento aranceral pero sì para evitar una recesiòn  para Mèxico y mejores soluciones para el problema fronterizo de Mèxico y Estados Unidos y la problemàtica migratoria de centroamèrica. Mientras  las canciones de Leo Dan vuelven a sonar  en Mèxico como en 1971; los diàlogos entre Nixon y Echeverria resultan muy diferentes a los de Lòpez Obrador y Trump; porque  ambos mandatarios guardan menos secretos y armas escondidas, aunque exista esa pared que nos separa siempre.