viernes, 28 de junio de 2019

ASI CAPTAMOS A LOPEZ OBRADOR










Por: José Angel Martínez

A un año de la victoria Lópezobradorista y a siete meses de gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador; se puede vislumbrar, la dificultad de cumplir las promesas de campaña para la cual se tienen menos de seis años para hacerlo,  y que ya se han visto en algunos casos encaminadas y en otras concretadas en este medio año. Por otra parte, también se puede apreciar la desesperación de aquellos que de manera enérgica desean que el Presidente siga gobernando con la donación de  lujos, gastos extras y privilegios para los sectores corruptos que han sido despojados del poder y de la estrategia neoliberalista, y que son los que  tachan de pifias  y de inconsciencias, las medidas presidenciales,  como si fueran errores del mandatario, cuando ya se había advertido de su proceder durante sus propuestas de campaña, mismas  que fueron avaladas por el pueblo de México, a quien no se le ha dejado celebrar su victoria democrática, primero por la incertidumbre de la amenaza del acostumbrado Fraude que podría de pronto surgir en altas horas de la madrugada, después por los pregoneros del sistema anterior corrupto,   que desde antes de que López tomará posesión de la banda presidencial, ya señalaban un fracaso en su modelo político y  que al tomar protesta, en menos de veinticuatro horas ya pedían su renuncia en sustitución del fraude acostumbrado. Ahora los votantes mayoritarios podrán celebrar un año  de respeto a su determinación y que seguramente será un grupo más abundante de aquellos  que extrañan el saqueo foxista y peñista, y que brincarían de gusto y darían cualquier cosa por poder ver a Anaya o a Meade con su casco de protección, revisando las pistas de aterrizaje que se cancelaron en Texcoco, en donde aterrizarían más hampones que aviones.  A siete meses de gobierno lópezobradorista ni se ha derrumbado el peso, ni se ha destrozado el mercado internacional, ni la bolsa de valores, ni se han ido del país los que lo habían prometido, ni tampoco los voraces empresarios han dejado de invertir,  aunque también tampoco han sido detenidos ni despojados del patrimonio que le arrebataron al país, lo que denota prudencia en la nueva forma de gobierno, que es perfectible pero no saqueadora, pero también intolerada por aquellos que decían con ronco pecho, que en la democracia se gana o se pierde con un solo voto; pero que ahora fueron poco más de 30 millones 113,483 votos,  del total de los 56 millones 508,266 sufragios emitidos, y que ahora salen a la calle más veces que los ganadores; únicamente  para mostrar su miseria ideológica.