No se podrá quitar de golpe y porrazo a aquellas asociaciones, cámaras y fundaciones vividoras, que son más conocidas por sus comidas y cenas de gala y la entrega de sus premiaciones, que por su verdadera labor social, cultural o empresarial. La asistencia social sin intermediarios y la reducción del presupuesto para personas morales con disfraz de labor altruista, eliminarán casi todos los cubiertos inútiles que tenían código de barras, para vividores elegantes y bellas damas de la caridad, en favor de la mujer, del cáncer, de la niñez y de otros oportunismos con etiqueta y sed de protagonismo. La austeridad republicana es una estrategia de gobierno del actual Presidente de la República, y fue la tenacidad de López Obrador quien lo tiene con la banda presidencial y con la de pronta aceptación de ciertos círculos sociales que están perdiendo privilegios abusivos. "Somos marros, cicateros en lo
que se trata de cuidar el presupuesto público, no habrá desperdicios ni corrupción”,
aseguró el mandatario del país. Así que el negocio de vender "prestigio social", tendrá que correr a cargo de las propias asociaciones de cazaincautos y compravanidades y ya no tendrán ayuda del presupuesto público.
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