El PRI abusó de la castidad e inocencia de José Narró por lo que tuvo que renunciar. El novato de setenta años, no sabía de los antecedentes peñistas, salinistas, y de tantos hechos lamentables como los del 68 que rodean al PRI e ingenuamente creyó que en el partido de escudo tricolor, no se manejaban intereses que no fueran el bienestar del país y lo chamaquearon. José Narro Robles, al dejar
la contienda electoral para
dirigir el Partido Revolucionario Institucional y de renunciar como miembro del
partido, señaló que lo hacía porque existía un padrón alterado como farsa en el crecimiento desmedido en Coahuila,
Ciudad de México, Campeche y Oaxaca. “Ellos
serán llevados a votar por quienes llenarán de vergüenza al partido",
detalló.