viernes, 25 de diciembre de 2020

LA HACHA DE ROCHA




































 

Según San mateo, en la escritura bíblica nos dice: Guardaos de los falsos profetas, que vienen a vosotros con vestidos de ovejas, pero por dentro son lobos rapaces.Por sus frutos los conoceréis. ¿Acaso se recogen uvas de los espinos, o higos de los abrojos?Así, todo buen árbol da buenos frutos, pero el árbol malo da frutos malos.No puede el buen árbol dar malos frutos, ni el árbol malo dar frutos buenos. Todo árbol que no da buen fruto, es cortado y echado en el fuego.Así que, por sus frutos los conoceréis. Lo anterior aunado a aquello de “Lo que Juan dice de Pedro dice más de Juan que de Pedro”, nos resumen la vida y obra del periodista Ricardo Rocha, que aparenta ser un comunicador de excelencia pero fijando atención se pueden observar rasgos que delatan otra cosa. Ricardo es al periodista de mayor credibilidad al que se ha enfrentado el presidente López Obrador, siendo que Rocha  fue de los pocos informadores que le brindó espacios  a López antes de ser Presidente, en lo que aveces parecía hasta un apoyo. En su programa ANIMAL NOCTURNO, en el fraude electoral del 2006, permitió que el público asistente al foro de TV AZTECA, emitiera gritos y porras en favor de AMLO, mientras que en la televisora de San Angel, Adal Ramones se encargaba de callarlos y cortar el programa ante los gritos de Fraude. También le hizo diferentes entrevistas como candidato a López y lo acompañó en su gira en campaña. Sin embargo atendiendo al juramento que hizo el hoy Presidente de la República, de que no iba a solapar ni a amigos, ni a compañeros de lucha y ni siquiera a familiares, aún con todos y los buenos antecedentes de Rocha y de su inteligente ejercicio noticioso, López Obrador no lo borró de la lista de periodistas chayoteros de los anteriores sexenios, que recibían contratos, publicidad o pagos injustificados para hablar bien y ser tapaderas del saqueador gobernante que estaba en turno. En el caso de Rocha, no fue un pago directo como ocurrió con otros periodistas a los que les compraron su lengua, pero sí fue una relación de trabajos periodísticos al servicio del presidencialismo con honorarios desproporcionales a lo que puede ser valuado un reportaje o documental y rompiendo la frontera del conflicto de intereses. Rocha acudió a reprocharle al  Presidente que lo haya mencionado en la lista de periodistas favorecidos por el gobierno anterior cuando incluso había recibido intolerancia de panistas y prístas por el hecho de entrevistar a López, a lo que el Presidente advirtió que no podía borrar  de la lista a nadie, y que lo confesado fue en respuesta a una solicitud del INAI. Desde entonces Rocha se ha encargado de criticar sistemáticamente e irracionalmente al gobierno del Presidente  Andrés, de quien lleva el mismo  nombre  su nieto de Rocha, en honor al hoy presidente. Y aunque en general podemos decir que Rocha es un buen periodista, de pronto sus actitudes saca a aumentar de tamaño, letras chiquitas, como lo es, su ataque a Salinas Pliego por defender a Azcárraga en la guerra de televisoras Azteca- Televisa, y en donde acabó cambiando de bando hasta  conseguir  ser trabajador del Salinas Pliego. El litigio Rocha  contra Televisa en una relación  de trabajo que no terminó nada bien y con demandas fuera de lo común. Las quejas de quienes trabajaron con Rocha que decían sufrir maltrato laboral y acoso en el caso de Sofía Niño de Rivera. A este rosario de detalles, tenemos que agregar que Rocha sirvió de escuela para periodistas como Paola Rojas y Adela Micha, quienes ahora ya son independientes de Rocha desde hace muchos años, que son titulares de sus propios espacios y curiosamente quienes también aparecieron en la lista de periodistas chayoteros. Por último, habla muy mal del proceder de Rocha,  que a quien defendió con rompedura de vestiduras ahora sin fundamentos reales lo ataque con el mismo ímpetu, cuando el agredido, es decir López, por más que se le busqué, no ha tenido contradicciones entre lo que le decía a Rocha desde hace veinte años, de lo que dice hoy, y de lo que ejecuta como Presidente, por lo que puede haber críticas en uno, en varios o en muchos puntos de vista  y no ser  un besapies de halagos, pero resulta cobarde y vengativo e imprudente que ahora Rocha ataque airaidamente todos y cada uno de los puntos que antes defendía; lo que resulta sospechosa la conducta de quien aparenta ser un periodista intachable y que fortalece la hipótesis de que cuando un periodista aparece en un medio informativo de gran escala, no puede ser independiente y por "algo" aparece y es apoyado por ese medio. No cabe duda que por esto y muchas cosas más, el sexenio lópezobradorista ha resultado todo un quitamáscaras.        Más en www.somoselespectador.blogspot.com