En un país monopolizado, resulta difícil para algunos periodistas, rescatar su opinión de la línea editorial de la empresa televisiva, sin embargo en este siglo, la aparición de la mujer que aporta su talento e inteligencia como en el caso de la periodista Paola Rojas; resulta evidente. A pasos lentos; pero la industria de la comunicación comienza a comprender la demanda social, de que en pantalla aparezcan personas talentosas y no aquellas que por tener un atractivo físico, sean usadas cual objeto, para anunciar el clima o captar la atención del televidente de manera obscena. Más en www.somoselespectador.blogspot.com