La igualdad de género comienza sin las distinciones, por lo
que El Día de la Mujer o el Día del Hombre es
fortalecer precisamente la desigualdad de género. La distorsión del
lenguaje que ha modificado sus sujetos y
sustantivos para feminizarlos en
aquellos que eran mixtos, o enaltecernos
por nuestra condición sexual o nuestras preferencias sexuales y otras conductas
absolutistas que se practican socialmente y se
exageran aún más en un día como hoy; no es más que el resultado de una
sociedad cuya doble moral, radica en la
manipulación, el acondicionamiento y condicionamiento de masas, que no es más
que la resulta simbólica de una tarjeta postal,
que es no hacer ni pensar con naturalidad sino bajo el procesamiento
mental inducido mediante la enajenación. El respeto a la especie humana debe
ser una lucha conjunta y solidaria que se ha etiquetado indebidamente para que
como sociedad nos dirijamos hacía caminos que parecen los correctos pero que nos
alejan de nuestros objetivos y de la convivencia sana y realizada en su pleno
desarrollo.