Marcelo Ebrard, secretario de Relaciones Exteriores, hace unos minutos ofreció una conferencia de prensa tras el anuncio realizado por las fiscalías de Estados
Unidos y México respecto a que el gobierno estadunidense retiró los cargos de
narcotráfico y de lavado de dinero contra Salvador Cienfuegos, ex secretario de
la Defensa Nacional, para que la justicia mexicana realice su propia
investigación. Ebrard añadió que la decisión de la fiscalía estadunidense no es
un acto de impunidad sino de respeto a México y a la soberanía del país.
Adelantó que Cienfuegos será investigado en México pues los delitos imputados,
presuntamente, se cometieron en el país.
Tal situación es una decisión histórica tanto para Estados Unidos como para
México, no sólo por tratarse de la detención de un militar mexicano, sino por el
traspaso de tribunales como acto inédito, lo que exhibe una relación
internacional estrecha y como nunca antes, entre el actual gobierno de Estados
Unidos que encabeza Donald Trump y el
gobierno mexicano, pero también es la primera consecuencia de un nuevo gobierno que está por venir para el vecino del norte. Más en www.somoselespectador.blogspot.com