"No les voy a fallar" es el grito pacífico triunfalista con que Andrés Manuel López Obrador ha inyectado la esperanza de un mejor México al ser el ganador de las elecciones presidenciales después de haber sido objeto de dos fraudes en las urnas. La gente comenta y lo sigue. Nunca antes un candidato electo había tenido un recibimiento con alegría plena siendo que López Obrador ya ha sido gobierno con las abolladuras que esto representa. "Esto no termina aquí", les advierte AMLO a sus seguidores y al pueblo en general, para que sean sabedores de que el buen gobierno es aquel que gobierna con y para el pueblo. Ni Venezuela ni Rusia,México vive uno de sus mejores momentos históricos de la vida contemporánea, pero que deberá enfrentar obstáculos de la resistencia imperial y empresarial nacional e internacional que en principio, tratarán de derrumbar está luna de miel, y cuya única defensa será, trabajar por lo prometido.