El presidente Santos
y Peña, de Colombia y México respectivamente, han mostrado ser serviles
a la política de Estados Unidos al descaradamente intervenir a nivel internacional en contra de
la política de Venezuela que nada más debe
ventilarse en Venezuela. Ambos mandatarios todavía tienen una lucha agónica por querer ser los
consentidos del imperio. Con el pretexto
de la emergencia de nuevos procesos de integración en América Latina,
como la Alianza del Pacífico (AP), integrada por México, Colombia, Chile y
Perú, han manifestado su interés por
lograr un crecimiento comercial que no es más que un acompañamiento para
descubrir el comercio chino, principal competidor de EUA y poder ser clientes
con fuego amigo. es común entre los presidentes del continente americano, ceder en todo con el gobierno estadounidense y luchar más por la política imperialista que por la de su país, para después de sus mandatos ser beneficiados económicamente.