ALGUIEN TIENE QUE DECIRLO.-Para el ciudadano de avanzada, el
voto resulta el último recurso del accionismo que se basa en una conducta cívica, política y
constructiva hacia un punto de conservación o de renovación en la comunidad
hasta extenderse a un poblado, a un Estado y a todo el país. Para el ciudadano ignorante
y con retraso político, participativo e ideológico; el voto es el principio de la participación
que se reduce a mínima, para delegar obligaciones y reacciones en otros, que es
el votado, y cuando éste los decepciona,
por no tener otra capacidad de operación
política, el votante deberá esperar a
otras elecciones para reabrir su supuesta participación por otra opción
electoral o en el peor de los casos dar
una nueva oportunidad a quien siempre lo ha decepcionado. Los primeros
ciudadanos, a los que nos hemos referido y que son los de avanzada , accionan y reaccionan de manera
particular, con una demarcación que abarca principalmente, sus círculos cercanos, mientras que los que
esperan ser votados por los ciudadanos limitados únicamente a votar,
intentan alcanzar un mayor margen de
acción, que sea masivo y cuyos intereses
pervertidos, son al final sus objetivos personales sobre los
particulares y muy lejos de ser las causas de los votantes. El grupo votante que
además no es accionante, por su simple acción de apatía disfrazada de eficaz participación, es fácil de definir como un
grupo ignorante y manipulable, por lo que para
los candidatos, resulta inútil llenarlos de propuestas, planeaciones o
bases estructurales que ni van a
entender ni van a atender, por lo que para ellos, se destina una campaña superficial,
de ataques en contra de los oponentes y con el dibujo prometedor de un mundo
fantástico. Cuando la ardilla quieres ser león, se da cuenta que es ardilla.
Cuando el ciudadano que no es de avanzada y pide proyectos y propuestas
políticas más que propaganda electoral de ataques y de promesas vacías, antes de
anhelar esa altura de contienda electoral, primero deberá darse cuenta, que es
ardilla y no debe realizar demandas que corresponden al león. El voto es un
instrumento eficaz para el orden democrático entre ciudadanos de conductas
políticas de alto grado pero resulta instrumento de control y contraproducente
, cuando quien lo emite, no cumple con la calidad de ser elector y actúa como
un civil que otorga al oportunista de esta situación y corrupto votante. Más en
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