Parece cercano por el pánico colectivo que causó, aquella declaración alarmista de Hugo López Gatell que aclamaba que la pandemia del covid19 no acabaría nunca, y mientras más desoladoras erán sus declaraciones acompañadas de pronósticos, todos erróneos,más fortalecía el ego del subsecretario de la prevención y la promoción de la salud. Y no detallaba que el virus y el padecimiento efectivamente no terminarían nunca, como ha ocurrido con la tuberculosis,la rabia, y otros males, pero que la pandemia sí terminaría aún con las variantes del virus que no deja de ser mortal. Aunque la vida ya no será la misma en cuanto al peligro eminente del coronavirus, sí podrá vivirse con la antigua normalidad, en cuanto el COVID19 se convierta en sólo un peligro más a los que diariamente se enfrenta el ser humano, que debería de valorar cada instante de su existencia. Desde pláticas con niños inteligentes cual programa de "Don Francisco" hasta momentos poéticos, fue como López.Gatell se convirtió en el funcionario seductor, negligente y parodia de profesor estricto, con su conferencia de prensa nocturnera con un comportamiento tecnócrata neoliberal, que contrastaba con "la mañanera" de López Obrador pero que también s ecomplemetaba, ya que el Doctor de mentalidad infantil, creyendo ser el centro de todas las cosas, servía de escudo para el golpeteo doloso y también criminal de los oportunistas antiprogresistas ante la pandemia. El peligro mortal no ha terminado, pero se ha disminuido, y parece llegar a su fin, en donde al menos por el momento es el COVID19 una enfermedad peligrosa como lo son muchas otras, y los números delatan el final de la pandemia, aunque aún con temores si podemos comparar los rebrotes que se siguen presentando en diferentes partes del mundo. Se acerca el adiós al cubrebocas y son cada vez mayores las personas que la calle los espera. El reporte técnico diario de la Secretaría de Salud sobre el avance de la
pandemia en el país, basado en la cifra
de contagios nuevos y el número de defunciones, señala sus números más bajos,
consistentes en 671 casos positivos confirmados por día y 15 defunciones en un
país de más de 128, 9 millones de habitantes. Respecto a la historia con más de 322,107 defunciones, el subsecretario de Salud apuntó dentro de la conferencia presidencial de el día de hoy, que la vacunación contra
COVID-19 cambió la perspectiva de la epidemia en la medida en que la gran
mayoría de personas hospitalizadas o que perdieron la vida no estaban
vacunadas, por lo que quienes se vacunaron tuvieron la probabilidad de
tener una enfermedad leve, en caso de contagiarse e ilustró que en la medida en que cualquier país del mundo tenga activa la
epidemia, exista transmisión del virus SARSCoV2, este virus puede propagarse
más allá de las fronteras del país o la región en donde esté activo y
propagarse a otras regiones, particularmente si la cobertura de vacunación es
muy reducida”. Sin embargo apegado a su característica futurista, el mismo López Gatell a quien muchos señalan el daño colateral de la pandemia; no por lo que dice sino por el tacto de como lo dice, también indicó: “Si llegara, toco madera, una variante más agresiva, pues ya
tendríamos que tomar otro tipo de decisiones, pero no hay manera de adelantar
vísperas, todos los días monitoreamos el curso de la epidemia, todos los días
ajustamos nuestras recomendaciones de acuerdo a la realidad”.Más en www.somoselespectador.blogspot.com