Todavía no llega a la silla presidencial y los medios informativos que no serán más favorecidos con las mochadas que les brindaba el gobierno por fortalecer el sistema de corrupción; ya expresan su molestia por esta medida que implantará López Obrador. El Presidente electo, disminuirá las oficinas de comunicación social para evitar subsidios subterráneos y desvíos de recursos de programas sociales para resaltar acciones de gobierno o atacar a adversarios en favor de los intereses empresariales y no de la veracidad informativa. Los comentarios que en estos días se emiten en pantalla y por radio, muchos son consecuencia del enfado por esta situación y porque algunos distorsionadores de la información tienen que desquitar, el beneficio antes obtenido. Los analistas neoliberalistas que pagan por debajo de la mesa para tener participación en los medios y defender con medias verdades sus intereses y los concesionarios -que de por si, ya estaban enojados por no poder lucrar con los spots electorales- han dejado venir toda su furia, al demandarle desde ahora al presidente electo, Andrés Manuel López Obrador; lo que no fueron capaces ni han sido capaces de demandarle, al actual presidente del país, Enrique Peña Nieto. López Obrador encaró a los medios informativos para hacerlos reflexionar, que siempre se sobresale la noticia de actos de corrupción de funcionarios importantes, pero que nunca se ataca a los altos niveles que son quienes ordenan, refiriéndose a las acusaciones a Rosario Robles que es una evidente corrupta pero no menos que su jefe inmediato y quienes sostuvieron mediante la iniciativa privada a ese jefe inmediato. Para los que pensaban que la guerra sucia había terminado en la campaña electoral y en los dieciocho años de acoso mediático para quien será el próximo presidente; se han equivocado porque la guerra continua, y como ejemplo, está la relación entre la prensa y el presidente en los Estados Unidos. Sin embargo la publicidad gubernamental dejará de ser un instrumento de control, según parece advertir quien será el nuevo Presidente de México, quien se ha pronunciado por un periodismo libre e independiente, quien ha bendecido la comunicación por internet y quien también dijo abogará por el regreso de periodistas bloqueados en este sexenio, como lo fueron José Gutiérrez Vivó y Carmen Aristegui.