“Yo he sido víctima de espionaje desde la época de Salinas”, aseguró el presidente de México, Andrés
Manuel López Obrador, quien ha sido el hombre más espiado hasta pasar la prueba
del ácido de la no corrupción. El primer mandatario izquierdista en México señaló
que de presentar denuncias no terminaría. De acuerdo con la investigación
realizada por The Washington Post y otros 16 medios de comunicación con la
ayuda de Amnistía Internacional y la organización francesa sin ánimo de lucro
Forbidden Stories, en los registros se incluyen los números de teléfono de su
esposa, tres hijos, así como ayudantes, un médico, dos exchoferes y el gerente
de su equipo de beisbol. Sus datos aparecen en documentos de más de 50 mil
números de teléfonos, 15 mil de ellos de México, que desde 2016, presuntamente
han sido seleccionados como pertenecientes a personas de interés por clientes
gubernamentales de NSO Group. “Yo he sido víctima de espionaje desde la época
de Salinas, por lo menos. No, estoy mal, desde antes. Si me pongo a presentar
denuncias no termino”dijo López de cara
a la nación al reconocer el espionaje en los gobiernos antecesores. En relación
a la posible existencia de un contrato con esta empresa de Israel con el
gobierno de México, celebrado en anteriores administraciones y quizá hoy
vigente, el titular del Ejecutivo sostuvo que se llevará a cabo una revisión.“No
sé si pueda existir el contrato, lo voy a revisar y hoy vamos a informar. De lo
que estoy seguro es que no se espía a nadie, habría que ver quién lo tiene. Se
hace la investigación, si hay contrato; (sin embargo) no creo que exista”,
remarcó.El mandatario recordó la desaparición del Centro de Investigación y
Seguridad Nacional (Cisen), ya que, señaló, la inteligencia artificial debe
utilizarse para combatir el crimen, no para el espionaje. “Es realmente una
vergüenza y es una prueba irrefutable de que imperaba un gobierno o estábamos
sometidos a un gobierno autoritario, antidemocrático, que violaba los derechos
humanos y el Estado era el principal violador de los derechos humanos”, dijo el
Presidente con alta popularidad en México, y agregó: “Ya no se espía a nadie,
ya no se hace.. El gobierno no espía a nadie, ni los opositores son espiados,
no hay censura para los medios de información (…) Por eso desapareció el Cisen
y lo que hay de inteligencia tiene que ver con el combate al crimen, es para
proteger a los ciudadanos, no es para espiar a opositores, periodistas,
dirigentes políticos, dirigentes de partido, dueños de grandes empresas, a las
iglesias”Más en www.somoselespectador.blogspot.com