ALGUIEN TIENE QUE DECIRLO.-Resulta una rebeldía irracional querer leyes de avanzada como la despenalización del aborto o la multicomposición de la relación de pareja que se ha limitado primitivamente al matrimonio, cuya inconformidad se asemeja al reclamo de la libertad sexual sin antes demandar el acceso a la educación sexual y a los servicios de salud respectivos.Aunque la CDMX ha sido la joya de la corona como la ciudad del país con legislaciones vanguardistas y Querétaro como la de mayor antiprogresista, la realidad es que el derecho mexicano ha sido huérfano de una identidad propia, y se ha basado en el sobrevaluado Derecho Romano, en legislaciones europeas y ahora en la homogeneidad de las legislaciones de los países del norte como conveniencia y pacto comercial más que como adecuación social. La ignorancia manifiesta de los comunicadores que dominan los medios convencionales, nos hacen creer que en el derecho Mexicano se ha despenalizado el aborto situación que es totalmente falsa, ya que la interrupción del embarazo sigue siendo un delito en todos los códigos penales del país, aun con el festejo callejero de muchos grupos feministas. Lo que realmente se ha legislado, es la exclusión de responsabilidad en aquella mujer que aborta bajo ciertas condiciones, principalmente cuando su embarazo pone en riesgo la vida de la madre o cuando el embarazo es producto de la violación. Antes de las reformas de avanzada sobre el aumento de excluyentes de responsabilidad para la CDMX, en el sur del país ya había aparecido la figura del mal llamado "aborto de fámelico", en donde se permitía interrumpir el embarazo, cuando no existían posibilidades económicas para cubrir las necesidades del producto. en la jefatura de Gobierno de Marcelo Ebrard se promovió y llegó a legislarse la interrupción del embarazo por la simple voluntad de la embarazada pero bajo una condición de no rebaso de semanas de embarazo y que el aborto debiera efectuarse en centros autorizados por las autoridades de salud, y en un principio,con lagunas procedimentales en la ley substantiva penal y en la ley General de Salud. En la actualidad, incluyendo a la CDMX, las semanas promedio en que se permite el aborto para nuestras leyes mexicanas como un excluyente de responsabilidad pero no como una despenalización, es hasta las veinte a doce semanas, es decir, en un aproximado de cinco meses de embarazo, ya que de otra manera el aborto está tipificado como delito que tiene como pena la prisión y cuya penalidad aumenta según las circunstancias. Sin embargo existen Estados que no se ha permitido el aborto ni siquiera en casos de violación y en la actualidad existen legislaciones retrogradas como la queretana en donde únicamente se permite el aborto para el caso de violación, misma situación que se presenta en el Estado de Guanajuato, que también está invadido por una sociedad en su mayoría conservadora y panista. El aumentar los excluyentes de responsabilidad para abortar en la CDMX, han permitido desde esta autorización, más de 230 mil abortos sin incidente alguno que sí ocurría en la clandestinidad. Actualmente se ha festejado que en el Estado de Veracruz se permita la interrupción del embarazo hasta antes de los 99 días y se ha dado a conocer tal excluyente de responsabilidad como despenalización del aborto, cuando la figura despenalizar, significa eliminar el delito del código penal y no condicionar la interrupción del embarazo. La controversia entre la ética y la moral que nace con motivo de la legalización del aborto condicionado, resulta casi inconciliable, por lo que la seguridad jurídica debe limitarse a brindarle las facilidades a quien por convicción determine realizar tal acto y de ninguna manera obligar a la persona que no lo quiere realizar. lo que es un hecho, es que en la mayoría de las ocasiones, la legislación de cada estado es el reflejo de su progreso, retroceso o estancamiento social.Más en www.somoselespectador.blogspot.com