Mucho ha molestado al mundo empresarial, que es el mismo que controla a los medios de comunicación, la cancelación del Aeropuerto de Texcoco por parte del Presidente Electo, Andrés Manuel López Obrador, al igual que aquella expresión de "me Canso ganso" que acabo con la corupción, porque acabo con la corrupción; al grado que los dueños del control mediático, en semanas correrán la expresión de "Fue un error votar por Obrador", cuando el tabasqueño todavía ni siquiera gobierna este país, que sigue siendo un desastre bajo el mandato de Peña Nieto. Mientras que se insiste que se perderán cientos de empleos por la no
construcción del “ eleva y aterriza
naves”; nada se dice de los cientos de amputaciones, electrocutados,
descalabrados y quemados; que han sido el resultado de la actividad de quienes trabajan en la construcción del Aeropuerto texcocano, con una
solapadora secretaría de Trabajo y órganos
sindicales al servicio de la modernidad
y los bolsillos de las altas esferas, que son
a los que López Obrador les mandó el mensaje de que deben darse cuenta
que estamos en la transición de un nuevo país,
cuyo gobierno quiere liberarse de la esfera empresarial. “no les serviré de
florero”, aseguró el próximo Presidente de la República.