sábado, 24 de noviembre de 2018

AL FARO DE LA OSCURIDAD
















Antes de que López Orador sea presidente del país; ya comienza a recibir ataques serios y destructivos para la buena realización de su gestión constitucional, como es el ataque de gobernadores que no  quieren ser supervisados por los llamados coordinadores, argumentando que se invade su esfera de mandatarios locales de sus Estados que son libres y Soberanos. El malestar de los gobernadores encabezados por quien será gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro resultan infundados y mal intencionados, pues perfectamente saben que la seguridad, impartición de justicia y toma de decisiones locales, -es decir aquellas que no son de competencia federal-,  la determinación la tiene el gobernador de cada Estado, tal y como se ha venido realizando en el orden constitucional y tal y como se realizó en el gobierno peñista, con la diferencia, de que el actual presidente Peña, abría y abría comisiones para “chupar” presupuesto y entregaba cartera abierta a  sus amigos de cada Estado para compartir el botín de la corrupción, y como ejemplo está, el propio  gobierno de Jalisco en donde Aristóteles Sandoval no se metió a sus bolsillos todo el Estado, nada más porque sus 78, 588 Kilómetros cuadrados, no le cabían.