La no corrupción y el corazón de Jesús, son para el Presidente del País, el detente más importante contra el coronavirus, a lo que muchos han interpretado como un mensaje para que no decaiga el ánimo social y como una forma de no mostrar preocupación ante un virus que puede ser menos peligrosos de lo que se menciona o de un problema social grave económico y un conflicto oportunista, según la lectura y responsabilidad de cada quien.