En ridículo cayeron los supuestos expertos en comunicación de almacenes voceriles y aquellos que no aprenden y que son acéfalos repetidores de mensajes, al decir que la supervisión que hizo el Presidente López Obrador del tren rápido de Santa Lucía resultó un simulador digital como los que utilizamos en los set de televisión, cuando que de lo que se trató es de una eliminación de imagen como producto del Manual de Bloqueo de luz como funcionamiento de la cámara de vídeo. Por lo que bastaría que los supuestos profesionales de la noticia mostraran un peritaje al respecto, una investigación de campo del lugar de los hechos y un seguimiento de donde acudieron los personajes que en el vídeo aparecen. La comunicadora Ana Elizabeth García Vilchis, en la conferencia presidencial matutina, también se refirió a la noticia de que el mandatario había presentado un vídeo más falso que un discurso de Lilly Téllez, y con contundencia indicó que el gobierno lópezobradorista no tiene un simulador, como lo acusó el ex presidente
Felipe Calderón, citando al comunicador,
Joaquín López-Dóriga, y en la junta de prensa, aclararon que en un principio se hablaba de que el
vídeo era un fotomontaje que fue grabado y truqueado cosa nada apegada a la realidad, además de que se
habría invertido en una película de estudio y que con el programa de edición
“photoshop” se habrían hecho arreglos al paisaje, Lo que desmintieron es que no se trata de un fotomontaje,
por lo que presentaron distintas evidencias consistentes en fotografías de cómo fue que el presidente y su comitiva, compuesta por su esposa Beatríz
Gutiérrez-Muller, el secretario de la defensa, Luis Cresencio Sandoval, Claudia
Sheinbaum, Alfredo del Mazo, secretario de comunicaciones y transportes, estaban
en el lugar y el entorno que guarda el
mismo. Más en www.somoselespectador.blogspot.com