El dirigente en
el país del Movimiento de
Regeneración Nacional (Morena), Andrés Manuel López Obrador aseguró
que el PRD ya no existe como
partido, es un
“cascarón” tal y como lo había prometido se convertiría el sol azteca con su
ausencialo que se refleja en los peores resultados electorales del PRD en los últimos 15 años. El rompimiento con Andrés Manuel viene de tiempo atrás, desde el histórico y nocivo plantón de Reforma ordenado por López Obrador después de la derrota de 2006. Desde entonces, Los Chuchos y sus simpatizantes tomaron distancia del “Rayito de esperanza”, el iluminado caudillo que insistía en conducir las riendas del partido en una ruta de continua confrontación y el ataque de otros partidos que se filtraban para acabar con el movimiento, el partido y la imagen de quien había tenido un buen desempeño como Jefe de gobierno y afectado en la oscuridad electoral.Para Andrés Manuel y su movimiento es claro que el PRD significa un partido entreguista, doblegado ante el gobierno, haciendo el juego del poder, como insistentemente fustigaron a partir del Pacto por México. Los Chuchos, los ganadores en el control del partido después de AMLO, quieren dibujar un PRD representa a una izquierda dialogante y constructiva, no basada en la marcha, el plantón y la confrontación pero que solo se ha convertido en otro frente priísta para apoderarse del gobierno de la ciudad, del páis y acabar con cualquier movimiento en contra del neoliberalismo, al grado de que el PRD no descarta una alianza con el PAN para luchar por la presidenciable, fortalecer al priísmo y evitar una nueva remontada de Obrador sin embargo en el PRD hay muchas más huestes o “tribus” como ellos las llaman. El grupo que pudiera alzarse con el poder y el control del partido, en esto que parece el fin de Los Chuchos, pudiera ser la corriente dirigida por René Bejarano y por Dolores Padierna. Ella ha hecho un trabajo comprometido, disciplinado y serio en el Senado, él sigue cargando con el estigma inolvidable de las ligas y Carlos Ahumada como una trampa insólita en los medios de comunicación, protagonizada por Adela Micha y el payaso Brozo, situación que en el pasado debate presidencial, Peña Nieto le reprocho a su adversario López Obrador, en ese entonces, todavía perredista, y que le salió contraproducente ante la respuesta del tabasqueño que reconoció la falta de los miembros de su partido que pisaron cárcel contrariamente al grupo de corruptos del gobierno priísta de Arturo Montiel en donde Peña Nieto formó parte. por lo pronto, Morena se ha alzado con la victoria en amplias zonas capitalinas, ha desplazado al PRD en su bastión clásico del DF, y apunta a convertirse en su sucesor como la fuerza política más importante en la ciudad de México. El PRD se ha distanciado de la ciudadanía, ha perdido contacto, enganche, carisma; los sucesos de Abarca en Iguala y la indolencia en su denuncia o el respaldo al ser electo, la evidente corrupción en múltiples delegaciones capitalinas, han minado su base electoral y lo han convertido en una izquierda desconectada, desangelada, sin oferta distintiva, sin compromiso auténtico y bajo la corrupción mancerista, cuando la capital del país ha sido junto con el Estado de México, los aparadores más importantes que se reflejan en la votación presidencial, por tal razón se dice que mientras más inepto sea Miguel Angel mancera más oportunidad tendrá el PRI de ganar votos, que parece ser, las aspiraciones del nuevo cascaron del PRD.
