jueves, 1 de marzo de 2018

MILITARIZACION, CORRUPCION, FALTA DE ADIESTRAMIENTO POLICIACO Y TORTURA














Las fuerzas policiales mexicanas utilizan en forma recurrente la tortura y los malos tratos, incluyendo violaciones, asfixia y descargas eléctricas, denunció este jueves el relator especial de Naciones Unidas contra la tortura, el suizo Nils Melzer. La práctica de la tortura y los malos tratos son “generalizados” y serían perpetrados por “las fuerzas de seguridad y agentes de investigación (… y) comúnmente usada para la obtención de confesiones o como método de castigo“, indica un informe sobre dos visitas a México.El reporte afirma que son utilizadas “la asfixia, violencia sexual, descargas eléctricas, amenazas de muerte, palizas y tortura psicológica”. También constata la existencia en México de “una situación de inseguridad e impunidad” y sostiene que “la lucha contra la delincuencia organizada ha incrementado la tortura y los malos tratos”.Pero, añade el reporte, “a pesar de los pronunciamientos de autoridades públicas, no se observan investigaciones imparciales e independientes y todo ello tiene vínculos con la impunidad que prevalece en México“.La ONU solicita además a México que, en una ley que estaría a punto de ser promulgada, no haya “excepciones a la regla de exclusión de las pruebas obtenidas mediante tortura”.También exhorta a que “los casos de violaciones de los derechos humanos sean de competencia civil aunque sean cometidos por militares contra militares”.En México “se cometen crímenes de lesa humanidad (…) bajo responsabilidad de las fuerzas militares de seguridad, en el contexto de la lucha contra las drogas”, explicó a la AFP José Antonio Guevara, director ejecutivo de la ONG Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos.“Dicho plan de torturar es viable por ausencia de investigación y castigo (…) no hay voluntad de las autoridades de llevar a juicio a los autores”, subrayó.La delegación del gobierno mexicano agradeció la presentación del informe, y reafirmó “su disposición a continuar el diálogo constante y constructivo” con el Relator Nils Melzer, pretexto para  almorzar más que para detener el problema que se presenta en el país, y que muchos por conveniencia, quieren señalar como historias del pasado, pero que es vigente y se fortalece con la militarización que acoge al mismo.