Ni cuando los sismos del 85 que terminó derrumbando las instalaciones judiciales, se habían cerrado tanto tiempo los juzgados de la Ciudad de México, como ocurre casi en todo el país, a causa dela terrible pandemia del coronavirus, que incluso ya ha cobrado con la vida de los profesionales de la justicia,por lo que resulta entendible aunque también igual de peligrosa, su temporal clausura desde el año pasado. Lo malo d etodo esto, no es la medida preventiva por si sola, sino que las autoridades del poder judicial, insisten que los tramites transcurren de manera normal por medio de internet, o que sus aperturas provisionales también son eficientes, porque eso no es verdad, la realidad es que no hay juzgados y no reconocerlo es parte de la ineficiencia que provoca mayor descontrol y permite abusos y engaños, por parte de abogados oportunistas y con falta de ética profesional. Más en www.somoselespectador.blogspot.com
