Aunque era de suponerse,
la razón de tantos invitados pertenecientes a asociaciones Civiles que
solamente justificaban su existencia y el presupuesto público que recibían, con
Premios y entrevistas a los medios, así como quienes eran entrevistados para
anunciar sus cursos de superación personal
e ideas mágicas; ahora se ha comprobado que la conductora Martha Debayle
chayoteaba sus entrevistas amenas y de damas popof y que cobró al Gobierno de Enrique Peña Nieto hasta por
las menciones que hacían sus programas y redes sociales como Facebook y
Twitter, y todo de manera privilegiada y subterránea. Lo anterior se descubrió mediante un reportaje
que presentó el medio digital Contralínea se revela información relativa a contratos
que suscribió Martha en el anterior
sexenio mediante la Media Marketing Knowledge, con razón social
BBMundo Direct, SA de CV, y propiedad de Martha Debayle.Sobre esta empresa,
Contralínea destaca que la empresaria ponía a disposición del gobierno espacios
publicitarios en las revistas impresas BBMundo –con costos que iban de 20 mil a
200 mil pesos– y Moi –cuyos precios oscilaban entre los 98 mil y los 299 mil
943 pesos–, además de menciones en el programa de radio que conduce y sus redes
sociales.El “media kit” expone que gracias al “valor alrededor de la marca”, en
el plano digital sus videos cuentan con 320 mil reproducciones y el costo por
una cortinilla de “presentó” [seguida por el nombre del “cliente”] era de 270
mil pesos.Otra forma de comercialización empleada por esta empresa tiene que
ver con el programa de radio de Martha Debayle, que se transmite de lunes a
viernes a las 12 horas en el 96.9 de FM: por “entrevista de contenido” –que
incluye 5 minutos al aire, más tuit y publicación de podcast en la página
marthadebayle.com– el costo era de 150 mil pesos; mientras que una mención de
60 segundos ascendía a 35 mil pesos. Por cortinilla de “presentó” en los
podcast el cobro era de 65 mil pesos, más IVA. Además vendía “branded content”
en su página en internet, por 140 mil pesos; y mensajes en sus redes sociales ,
por 51 mil 750; en Live (de 3 a 5 minutos) por cotización; y en la red del pajarito azul por 67 mil 700 pesos. Otros productos que ofrecía
al gobierno federal eran: “e-mail blast”, por 115 mil; y “banner en news”, por
66 mil pesos.En total, esta empresa logró ventas con el gobierno de Peña Nieto
por 8 millones 243 mil 761 pesos. Contralínea buscó la versión de Debayle sobre esta información, y
habló a la oficina de BBMundo Direct, SA de CV, con la colaboradora Sandra
Rueda, a quien se le explicó el tema de la venta de contenidos. Ante la
costumbre de corrupción que embarga a
los medios de comunicación y a la vendimia del periodismo, esto no tendría
porqué ser malo, pero se vuelve perverso
y no ético, cuando el periodista no lo señala como un espacio pagado por el
exponente que acude a la estación de radio o de televisión, y se disfraza de una entrevista periodística en donde se descubren
atributos del pagano. Además de que los
pagos desproporcionados por cada entrevista, no son más que desvíos inmorales ,
cuando su origen es de presupuesto público y viniendo de ingreso privado,
resulta un engaño periodístico no advertir que quien es está siendo
entrevistado compró su tiempo, y en cambio se disfrace la entrevista como mérito
propio del programa que no tiene porque cobrar a sus invitados, ya que tal
situación es maliciosa y poco profesional de la entrevistadora y de poca
dignidad de quien paga la entrevista, y
más cuando Debayle se ha alzado el cuello de ser una periodista respetable al igual que Oscar Mario Beteta o Joaquín
López Dóriga que hasta lo nombraban Teacher, y que sí son los maestros, pero de
la corrupción, al ser los chayoteros de mayor escala y de menor credibilidad. Lo evidencial ha causado desilusiones para los admiradores de Martha Debayle y confirma la teoría de quien está en la radio o la televisión comercial, forzosamente tiene un proceder subterráneo, sino no se les permitiría estar en dicho medio masivo, que es una meta aspiracional para muchos chayoteros.