Grupos de choque se
manifestaron en contra del presidente Daniel Ortega de Nicaragua, quien no ha
podido amarrar al tigre a lo que Edmundo Jarquín, ex diputado nicaragüense por
el gobernante Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) y actual miembro
del disidente Movimiento Renovador Sandinista (MRS), calificó como un conflicto no armado
pero sí una rebelión cívica con diversas manifestaciones de resistencia en contra el régimen de Daniel Ortega. El ambiente de tensión creció hoy en
Nicaragua tras un fin de semana en el que los organismos humanitarios
reportaron la muerte de al menos 7 personas en enfrentamientos violentos y
denuncias de un ataque con insecticida en la población de Masaya.El país vive
desde abril violentas protestas, que han dejado más de cien muertos y han
estado marcadas por enfrentamientos entre la población y la Policía, esta
última, según los manifestantes, apoyada por fuerzas parapoliciales
oficialistas que atacan principalmente por las noches sin que el Gobierno
aclare el objetivo de los asaltos. En Managua la actividad comercial es
notablemente menor, algunas de las grandes tiendas en centros comerciales han
cerrado sus puertas o reducido sus horarios, mientras que los mercados son
menos visitados.Las terminales de autobuses intermunicipales e interdepartamentales
tienen poca afluencia, debido a los bloqueos de carreteras en toda Nicaragua.En
redes sociales las personas cruzan mensajes sobre salir lo menos posible a la
calle por temor a ser detenidos por policías o ser víctimas de asaltantes. El
pánico ha sido la arma importante para la confusión política y la falta de
participación ciudadana quien se mantiene en sus casas.