Irina Baeva bajo la promesa de pisar el paraíso, al involucrarse a un proyecto de un productor anodino como Juan Osorio, cuyo supuesto éxito está basado en el buen hablar de su empresa y periodistas a modo, pero no a la eficacia de sus productos televisivos que llegan hasta lo corriente, pues le resultó todo lo contrario al vislumbrarse un fracaso para la puesta en escena “Aventurera” en donde mal utiliza una marca de una obra exitosa, que en realidad es otra historia a merced de as ocurrencias del productor que se involucra como escritor, director y que en cada proyecto suyo, jala con sus parientes, novias y toda la “vecindad del chavo”, circulo al cual no quiso entrar ni Karol Sevilla al haber sido novia del productor ni Ariadne Díaz que huyó de las producciones de Juan Osorio para escapar de sus propuestas para ser protagonista de sus dos últimas telenovelas, que ha sido un fracaso y que la más reciente llega mañana a su final en donde participa en ello, la actriz Altair Jarabo, ridiculizada, como antes lo fue Víctor González al dibujarlo en una escena sin pies ni brazos en una telenovela con horario familiar. La música de terror sería la apropiada para relatar que desde hace cuatro años Juan Osorio ha perseguido a Ariadne Díaz para participar en sus proyectos, la quería como protagónica, de una nefasta telenovela llamada “ ¿Qué le pasa a mi familia”, al grado de asegurar que ya la había convencido, pero la actriz logró emplear su talento, también para escapar del mal productor y se excusó señalando que no se ausentó de las pláticas sino que los tiempos no terminaron de cuadrar y no por problemas con el productor del proyecto que iniciará en noviembre próximo o la televisora mexicana. Y es que hasta una famosa como Wendy Guevara que su única gracia es ser transexual y salir de la casa de los Famosos, se negó a trabajar con Osorio. Ahora Ariadne observa en el fracaso de Irina, lo que hubiera podido ser su participación en la telenovela “oso-osoriana” de haber aceptado y no haber huido. Ariadne se ha confesado ser amiga de Irina y hasta la ha apoyado en otras ocasiones cuando la rusa ha sido atacada en su vida personal, pero por ahora, será mejor que la jalisciense ni se pare en el Salón Los Ángeles, después de que ha librado a la boca del lobo. Irina es el rostro más bello que haya tenido una aventurera pero pesa más la ineficacia de Osorio que su empeño actoral en la obra. Más en www.somoselespectador.blogspot.com