En este mundo tan profano quien muere limpio no ha sido humano, diría el magnocompositor älvaro Carrillo, por lo que siempre habrá cola que nos pisen como el caso de la linda comunicadora del gobierno federal, Elizabeth García Vilchis, quien se ha ganado el odio de los lectores de noticias
al servicio del saqueo empresarial por
ser la encargada de la sección Quién es quién en las mentiras de la semana, en
la conferencia matutina del presidente Andrés Manuel López Obrador, y quien fue
grabada cuando se “metía en la cola” para emitir su voto en las
elecciones del partido Movimiento
Regeneración Nacional (Morena) en Puebla. Sin respetar la fila, Liz junto con su esposo, René Sánchez Galindo, exsecretario
de Gobierno de la administración de Claudia Rivera Vivanco, García Vilchis iba saliendo de la carpa de votación, tras
saltarse la larga fila de personas
que estaban esperando realizar el mismo
ejercicio de votación, que con maña anticipó Elizabeth, quien portaba su
cubrebocas de color negro. La persona que la fue grabando después de colarse por
delante de la larga fila, también los cuestionó por qué ingresaron por la
salida y no por donde estaban haciéndolo el resto de los militantes de Morena,
a lo que Elizabeth García Vilchis solamente le tocó con su mano el brazo de una
manera cariñosa, a lo que quien grababa pidió lo soltara y fue su acompañante,
el único que emitió comentarios y a la vez que lo negó, también dejó entre ver que justificaba su acción, argumentando que la falta estaba
justificada ya que los acompañaba su hijo menor, en un día que estaba
fuertemente soleado. “Nadie se coló. Llegamos temprano. Para evitar que Camilo
[su hijo] pasara una crisis pedimos ayuda. Regresamos en su momento. Decidimos
educar en la participación popular. Como siempre, en cada ejercicio de
participación democrática llevamos a Camilo”, después escribió René Sánchez Galindo en sus comunicaciones públicas.