miércoles, 20 de marzo de 2019

LAS MANOS PERVERSAS
























La pobreza e ignorancia del pueblo ha sido un negocio redondo para los acaparadores de la privatización en México; de ahí nacen  condicionamientos mentales que el televidente hace propios y de donde  surgen los grandes intelectuales que monopolizan a las casas editoras con la categoría de  genios ante una nación  que los adopta como únicas gotas de cultura en un desierto de manipulación y de estímulos antisociales, de flojo pensamiento, y de crianza de atraso. Fue en la casona  de Berlín 265, donde el monigote con disfraz de intelectual,  de nombre Enrique Krauze Kleinbort, recibía la confianza de la mafia del poder, (que para muchos era ficción de un anciano), - y que tan existe-,  que estaba compuesta  por los mal llamados "empresarios", y que son más bien, los acaparadores del sistema político de saqueo a la nación,  y que encomendaron al sirviente escritor, la campaña negra en contra del candidato de oposición y hoy Presidente del país, Andrés Manuel López Obrador. La agrupación maliciosa operaba encabezada por Alejandro Quintero que  fue desligado de Televisa para ponerse a las ordenes de Luis "Virrey" Videgaray y de Enrique Peña; así como los acaparadores del comercio  en donde destaca Alejandro Ramírez, Alberto Bailléres, Germán Larrea, Los X González, Los Slim, Emilio Fernando Azcárraga Jean y otros parásitos del campo económico de México, del cual  se han adueñado impunemente con monopolios plenos que  aseguran su permanencia mercantil y evitan la llegada de nuevos y honestos empresarios. Recordemos que aquella cinta de "El Populismo en América Latina" que se intentó fuera  proyectada en las acaparadas salas de cine; ni siquiera pudo estallar, ante el Estado profundo  norteamericano,  que no podía solapar un tercer fraude para un mismo hombre y para una misma oposición aunque ahora dividida y atacada por  el  priperrepanista.  Ahora las cucarachas están saliendo aceleradamente de su  escondite, en plena revolución política, aunque no ideológica, y que ha sido encabezada por filtraciones en la esfera de poder y de gobierno pero no por el pueblo aun domesticado. Sin embargo los roedores de la Empresa  no han perdido la batalla, y aunque temerosos, seguirán su combate,  mediante sus voceros del sistema y sus recursos económicos, ya que no es conveniente por el momento,  para las finanzas del país, ni encarcelarlos,  ni la recuperación  del patrimonio de la nación acaparado en sus  ganancias como  producto de su ejercicio  despojador.  Aquel que señalaban "un peligro para México"; es cauteloso, no tiene acciones arrebatadas en contra de los formadores de empresas ilícitas que han controlado sindicatos, que han armado Cámaras de Comercio, Consejos de Negocios, fundaciones y otras agrupaciones de saqueo y doble moral, y no actúa en contra de ellos de manera inmediata,  para evitar que como Presidente de la República y líder del movimiento de transformación de gobierno (más que de Estado), pueda ser un contratiempo y una desgracia para México y no un peligro para el conjunto perverso empresarial y para los ardidos, que sin poder ni partidista ni de gobierno, quieren apoyarlos.