De ninguna manera se puede minimizar el problema de asesinatos en México ni la violencia generalizada que vive el país y casi todo el mundo, sin embargo es claro que existe una política global en también sobredimensionar al feminicidio, ya que los actos violentos y terroristas, han traído consigo muertes de muchas mujeres pero no menos que el número de hombres que también son asesinados a diario, en donde ni todos los crímenes a mujeres son femenicidios ni todos los autores de los crímenes son hombres, sino que existen criminales y victimas que son mujeres y hombres. Aunque nadie niega la violencia generalizada y no sólo de género, ni tampoco el terrorismo real, es claro que también se debe reconocer que existe un terrorismo formal por medio de los noticiarios y otrosespacios de los medios de comunicación que disfrazan su supuesta labor informativa, en el abuso de notas que pueden traer el pánico, acrecentando la nota roja por la nota de seguridad pública o policíaca y otras también de interés público. Y es que como hemos dicho en anteriores oportunidades, no s e trata de "matar al mensajero", pero sí y desde luego que sí, informar con claridad y proporcionalidad exacta, el hecho que se está abordando. Víctima de esta neurosis colectiva de origen propagandística con el fin de un control de masas por medio del miedo, fue la que sufrió Joy Huerta Uecke, integrante del dueto
Jesse y Joy, quien en plena conferencia de prensa para la presentación de su
material musical “Clichés” fue que no pudo contener el llanto, bajo un cuadro
de desesperación en donde notoriamente afectada, adjudicó su estado, a la ola de
violencia en México, en específico por los "feminicidios" que ocurren día con día
en el país. Es tanto su temor, que la integrante del dúo Jesse y Joy
prefiere no salir a la calle. Incluso, confesó que desde hace un tiempo procura
mantenerse lejos de las redes sociales para evitar las noticias que afectan en
su sensibilidad, sobre todo ahora que tiene dos hijos: Noah y Nour. “Vivo como
cada mujer que sale a tomar el camión, el metro, con mucha angustia. Yo espero
que en un futuro así como estamos todos aquí cada quien, desde nuestra
trinchera, hagamos lo que podamos”, comentó la cantante al reflexionar acerca del
papel que la sociedad tiene en el problema, y la cantautora compositora y
guitarrista nacida en la CDMX, sentenció: “La vida ya no me da para las malas
noticias. No puedo porque son tantas las mujeres
que nos hacen falta y lo digo con miedo al mismo tiempo porque estamos en un
país en el que cada vez se empieza a atracar más la libertad de opinión
pública”. Más en www.somoselespectador.blogspot.com