A la bodega de tiliches como sucedió con Brozo y Adela Micha; ahora Carklos Loret de Mola sufre las consecuencias de haber perdido la credibilidad del público, ante la insistencia de apostar a un doble juego, con el fin de desprestigiar el proyecto de Andrés Manuel López Obrador y fingir ser un periodista veraz. Ahora el obsoleto lector de noticias podrá decir que es un periodista perseguido por el Estado, después de salir de Televisa que ya no quiso sus servicios ante su baja audiencia, pero tales quejidos, Carlos los efectuará en los diarios y radiodifusoras en que participa, al ser tolerado aún con su desprestigio. Por su parte, Marta Guzmán excompañera de Carlos Loret en televisa, señaló en sus redes sociales: "Trataré
de no sonar agresiva. Pero quiero ser lo más honesta posible. No es ningún
mártir ni le están coartando su libertad de expresión. Obtiene lo que se ha
ganado por incongruente, vendido, arrastrado y no menos misógino",
escribió.