viernes, 22 de diciembre de 2017

MILITARIZACION EN MARCHA












El presidente Enrique Peña Nieto promulgó  la Ley de Seguridad Interior, pero ofreció no emitir declaratoria alguna de protección en los términos de la misma hasta que la Suprema Corte decida sobre su constitucionalidad.“Soy consciente de que este ordenamiento que habría de promulgar esta tarde es especialmente sensible para la vida pública del país; por eso no emitiré declaratoria de protección de seguridad interior en los términos de esta ley hasta que el máximo tribunal decida sobre su constitucionalidad”,  señaló el mandatario. Por otra parte, La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) y la Oficina en México del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH)  y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) hicieron un llamado urgente al Estado mexicano para que no apruebe la Ley de Seguridad Interior pues a pesar de algunos cambios realizados al proyecto sigue presentando aspectos que no garantizan el respeto a los derechos humanos.La Declaración de Protección a la Seguridad Interior podrá presentarse no solamente cuando se superen las capacidades efectivas de las autoridades competentes, sino también cuando éstas se “comprometan”; lo que reduce el umbral indispensable para su emisión (artículo 11, fracción I).Asimismo, se podrán llevar a cabo acciones de seguridad interior ante la mera existencia de riesgos de seguridad interior (artículos 4, fracción I y 26), los cuales son definidos como situaciones que potencialmente pueden convertirse en amenazas (artículo 4, fracción III). Al quedar al arbitrio de la autoridad la existencia de éste tipo de situaciones, dichas cláusulas habilitarían la ejecución de la ley en un número indeterminado de escenarios. De igual manera, La legislación permite que las Fuerzas Armadas actúen de manera autónoma en esta materia y no necesariamente bajo la subordinación de las autoridades civiles o en coordinación con ellas (Artículos 4, fracción I y IV, 11 y 20). Por lo que tal legislación no es justa ni para los civiles ni para los militares.