Aunque Manzanero es un compositor romántico de excelencia, no todas sus composiciones han sido éxitos, muchas se encuentran en la sombra del fracaso de manera justa y otras totalmente injusta, y hay quienes señalamos que las autorías menos conocidas de Armando Manzanero, son mucho mejores que aquellas en las que ha abusado en grabarlas. Con una magia repetitiva de palabras, Don Armando también ha hecho arreglos en canciones de otros compositores, en lo que ha sido su mayor pecado capital. En el caso de Sabor a Mí de Alvaro Carrillo bajo su mano, cambió amar por querer en la estrofa que dice "olvidaba decir que te amo (no "que te quiero") con todas las fuerzas que el alma me da; quien no ha AMADO que no diga nunca que vivió jamás". y en Todo o Nada de Vicente Garrido, cambió añoro por adoro al señalar "Muere la esperanza que añoro, pues teniéndolo todo nada te puedo dar"; cuando una esperanza no se puede añorar. Sin embargo el mayor éxito de Manzanero, sin descontar su talento, ha sido gracias a los aires de divo con los que se baña, cuando aún con su genialidad, no es inalcanzable; ni el máximo compositor que haya dado nuestro país, claro que el romanticismo no es igual, con que sin Manzanero, pero sí existen autores de mejor manufactura, - aunque todo es cuestión de gustos-.
