El golpeteo mediático al Presidente Andrés Manuel López
Obrador ha llegado al extremo de la desesperación que incluso que ya no les
basta tener a expertos en montajes y
payasos para atacarlos, sino que también
han integrado en los programas
noticiosos, a modelos para que tengan cápsulas de análisis como quien da el
clima, para transmitir el mensaje direccionado, ante la falta de atención por
parte del público, hacía lectores de noticias como López Dóriga, José Cárdenas
o Ricardo Rocha cuyas balas se han vuelto de goma en contra del Presidente de
la Nación. Tal es el caso de Karla Pulido quien ha ejemplificado en carne
propia como la belleza por más impresionante que sea, no puede suplantar ni la
inteligencia ni el conocimiento. De no ser usada como merolica, y que sus análisis
sean en verdad propios y no del teleprónter, resulta que los comentarios
y afirmaciones de Karla resultan
disparatados. Como ejemplo, sus dos más
recientes comentarios. En uno señala
que así como López Mateos entregó la luz al país y Lázaro Cárdenas el petróleo,
ahora López Obrador quiso hacerlo con el Litio, nada más que de manera
simuladora porque el Litio ya era patrimonio del país. El mensaje
simplista e indigno de una comunicadora,
puede resultar prudente y lógico para el receptor, y de fácil convencimiento,
pero quien lo expone tiene obligación de exponerlo cuando no se trata de un
golpeteo con conocimiento de causa y sin envolverlo de estupidez. Y es que lo
que no dice o no sabe Karla, es que en
el caso de López Mateos se tuvo que expedir una ley para crear lo que conocemos
como la Compañía de Luz, y de igual
manera en el caso de Lázaro Cárdenas en donde
se creó el Instituto del Petróleo, como órganos de tutela del Estado y
con base legal. Pues precisamente es lo mismo en el caso de la llamada Ley
Litio, cuya nueva observancia no es que nacionalice lo que ya es de la nación,
sino que se establece una base legal sólida para crear el órgano de tutela, que
pronto nacerá conforme a los puntos legislados
para el Litio. Por lo que una
cosa es el lenguaje común y otra el jurídico, y es lo que ignorantes como
Karlita no comprenden. Lo mismo ocurrió cuando se dijo que José López Portillo
había expropiado la banca, siendo que la banca siempre ha sido del Estado y de
lo que se trató fue de retirar a particulares el uso de la misma, además de no tratarse de un bien inmueble por lo
que el nombre de explotación no era el
correcto, ya que la banca no son los edificios
en donde operan las instituciones
bancarias. El otro comentario reciente de Karla Pulido, se refirió a que el
Presidente López Obrador fue quien perdió al no lograr la reforma Eléctrica,
que en principio de cuentas más bien se trataba de una contra reforma, y cuya
perdedora real fue la nación mexicana, mediante un sistema de votación que no
hace valer la mayoría aritmética o llamada mayoría simple sino una regla de
tercera parte llamada mayoría cualificada. Ahora por lo que respecta a lo
político, sí alguien fue el ganador es
el presidente, ya que de un solo tiro exhibió a los malos legisladores
comprometidos con empresas extranjeras y por otro lado se puso la capa de
súper héroe como un salvador del Litio y
como un gobernante con reacción inmediata y con propuesta legislativa que no
tienen ni los propios legisladores, lo que lo convierte en el segundo
Presidente más aceptado en todo el mundo. Pero bueno, en el peor de los casos,
es preferible escuchar citas mentirosas en la voz de una mujer guapa que en la
ronquez de una locutora borracha. Más en www.somoselespectador.blogspot.com