La mediocridad de la
liga de futbol en México permite que los equipos todavía no estén armados y ya
estén disputando el torneo, ya que las
flexibles reglas de competencia están diseñadas para obtener ganancias económicas sobre el
principio deportivo. Cualquiera puede calificar y cualquiera puede ser campeón
semestral. Es por eso que mientras el América se encuentra en plena competencia , apenas bajan del avión sus
nuevos refuerzos. Más de 300 aficionados
americanistas prefirieron ir al aeropuerto que al Esatdio de La Corregidora
donde jugaron las águilas, con tal de recibir a Jérémy Ménez y Andrés Ibargüen de nacionalidad francesa y colombiana. Ménez,
quien ha pasado por el PSG, Roma y Milán, no imaginaba tanta
algarabía cuando en la zona de bandas de equipaje del aeropuerto capitalino
posó con una bufanda de las Águilas. Mientras que Ibargüen, quien llegó
procedente de Buenos Aires, pegó una carrera a toda velocidad para desmarcarse
de las barras de animación, La Monumental y Disturbio 77, con las que convivió
y posó para tomarse fotografías antes de emprender la huida en una camioneta. Ahora solamente falta que los jugadores se
adapten a una temporada que ya ha iniciado al igual que a los volados del
futbol mexicano, en donde de una semana a otra el líder puede ser zotanero y el zotanero líder. Más en www.somoselespectador.blogspot.com