El movimiento cambiario que ha observado nuestra moneda con respecto al dólar en los últimos días, no debe preocuparnos demasiado. El haber pasado de los 13.00 pesos por dólar a 13.50, no es producto de algún cambio fundamental en nuestra estructura económica que nos haya debilitado; lo que sucedió es que el dólar es la moneda que se ha fortalecido no sólo con respecto al peso, sino con relación a prácticamente todas las monedas del mundo.
Durante los pasados 10 años el dólar perdió valor con respecto a las monedas más fuertes como son el euro, la libra esterlina, el franco suizo etcétera; sin embargo, ahora el dólar ha entrado a un ciclo diferente que hará que se fortalezca. Las razones que explican ese cambio es que los EEUU han logrado mejorar sustancialmente su desequilibrio fiscal al disminuir los abultados déficits que venían arrastrando; además, su economía ya está en proceso de un crecimiento robusto y sostenido que hará que el año entrante crezca entre el 2.5% y el 3%. Pero lo más importante es que este mes termina el proceso de estímulos monetarios que trajo como consecuencia que en los últimos cinco años se emitieran 4.6 trillones de dólares (en anglosajón), lo cual lo debilitó.
Fortalecimiento del dólar
Este proceso de fortalecimiento del dólar va a perdurar en los próximos años, por lo que algunas divisas tendrán que ajustar sus paridades contra el dólar a partir de una nueva realidad.
Las monedas que más van a resentir esta evolución son aquellas de los países que estén más endeudados y que tengan déficits comerciales importantes. Es interesante señalar que un dólar fuerte provoca la disminución en el precio de las materias primas, ya que al revaluarse éste, con la misma cantidad de dólares se puede comprar más mercancía; pues bien, esto será muy negativo para aquellos cuyo comercio exterior está fincado fundamentalmente en productos primarios.
Ajuste de monedas
Naciones como Brasil, Chile y Argentina, entre otras, tendrán que ajustar sus monedas a la nueva realidad. El caso de México, afortunadamente, es distinto, ya que somos una nación que exporta preferentemente manufacturas, y el petróleo cada vez pesa menos en nuestra exportación total.
Las monedas de los países emergentes se beneficiaron mucho con la caída de tasas en los EEUU, porque una parte de la enorme liquidez que generaron los programas de expansión monetaria fue a invertir en monedas de países emergentes que ofrecían intereses mejores que los “treasuries”. Ahora que es inminente que las tasas estadounidenses subirán, una parte de esos flujos regresará al dólar debilitando las divisas de dichos países.
México
Como mencioné antes, México irá en contraciclo de las demás naciones en proceso de crecimiento, porque por un lado nuestras exportaciones de manufacturas tenderán a crecer por una economía fuerte de nuestro vecino del norte, y además porque se esperan flujos importantes de inversión extranjera directa para aprovechar las oportunidades tanto en el sector de telecomunicaciones como en el energético, producto de las Reformas Estructurales recientemente aprobadas. El corto plazo es difícil de pronosticar por la alta volatilidad, pero en un enfoque un poco más largo, por ejemplo a diciembre de este año, en CI Estrategias por Somoza Musi estimamos una paridad de 13.20 pesos por dólar para fin de año